Bienvenidos¡¡

¡¡¡¡BIENVENIDOS AL PARAÍSO DE LA PURIFICACIÓN !!!!

miércoles, 3 de noviembre de 2010

BIENVENIDOS AL PARAÍSO DE LA PURIFICACIÓN, TEPETITLA

Gloria Hernández Velázquez


BIENVENIDOS AL
PARAÍSO DE LA PURIFICACIÓN

Este pequeño pueblo, situado a la orilla del antiguo complejo lacustre del altiplano mexicano, albergó aves y vegetación de colorido exuberante. Se dibujó en el entorno paradisíaco de los baños del Rey Poeta de Texcoco, quien tuvo aquí uno de sus bosques predilectos.

Nuestra joven cronista, orgullosa de la belleza  importancia histórica de su pueblo, describe algunas
de sus sorprendentes características.
La historia comienza en lo que hoy son los ejidos, llamados San Esteban, San Tiburcio y el último y más importante, la Ascensión.
En éste se encontraron ruinas de una ermita; ahí comenzó la evangelización  por los primeros frailes franciscanos que venían de Texcoco.
Después de algún tiempo de la llegada de los españoles se desató una epidemia de una enfermedad desconocida y con ello la muerte.
Al quedar pocas personas, éstas subieron a lo que hoy es el pueblo, encontrando en él alivio a sus males.
Este lugar fue uno de los bosques del rey Netzahualcoyotl (Tenochco), en él se encontraban aves de bello plumaje, venados y  otros animales, dos riachuelos y un hueyapamil. Los dos riachuelos
bajaban por lo que hoy son las calles de Tezoncalli y Huexotitla; el hueyapamil atravesaba la mitad del cerro del pueblo hasta Tecampanotitla
(en nuestros días hay vestigios de este hueyapamil). Con
esta agua se regaban los sembradíos de plantas medicinales cultivadas en terrazas. Los nuevos habitantes utilizaron estas plantas para sanar sus cuerpos, y con el aire puro y el agua se recuperaban
y purificaban. Así, llamaron al pueblo “Purificación” y para dar gracias a la Virgen María por sanarlos llamaron al pueblo: “Nuestra Señora de la Purificación” (dato encontrado en el AGN de 1738).
Más tarde fue llamado “La Purificación Tepetitla” o “La Purificación en Tenochco, Tepetitla” por encontrarse junto al cerro. Los habitantes
del pueblo toman como patrona a la virgen de la Candelaria y la festejan el dos de febrero.